Ayer, 04 junio de 2014, en el Centro Cultural Eduardo Úrculo, de Madrid, tuvo lugar el 3er. Encuentro de Salud Mental de Tetuán.
Tetuán es un antiguo y popular barrio situado al norte de Madrid, dentro de lo que se suele llamar la "almendra central". En la actualidad es una mezcla urbanística y poblacional que reúne zonas de construcción tradicional -corrralas incluídas- con pequeñas zonas industriales y zonas completamente nuevas producto de la gentrificación. Por supuesto la mezcolanza de la población -con un gran número de inmigrantes incluídos- es reflejo de la estructura urbana. Como lo es la participación colectiva en los procesos de la vida social del barrio.
Esta es la segunda vez que acudo a estos Encuentros y en las dos ocasiones me ha sorprendido lo mismo: la alta participación social de la población del barrio. Y el predominio de las mujeres en los colectivos y asociaciones.
Dirige los Encuentros el Dr. Mariano Hernández Monsalve, del Centro de Salud Mental de Tetuán, a quien conocí -como paciente- hace ya bastantes años y de quien me consta su gran nivel profesional y su dedicación entusiasta al tema de la salud mental en el entrono social.
Por este Encuentro, cuyo tema era "Las etapas de la vida y la salud mental" pasaron ayer colectivos que trabajan tanto en la salud mental propiamente dicha, como otros que se ocupan de la creatividad en los niños, de las acogidas de niños, de los servicios de dinamización en las asociaciones de vecinos, de asociaciones de inmigrantes, de asociaciones de mujeres que tratan la transgresión de los mandatos de género como clave para la salud mental, de stop desahucios, de mujeres creando, del trabajo como proyecto de vida, ... Un programa denso y apretado que quizás sea la única objeción que se le puede poner al encuentro: mucha tela que cortar en tan poco tiempo.
Viendo la gran participación y el seguimiento de los Encuentros, ¿sería posible plantearse otro formato? ¿Mañana y tarde? ¿Dos días? ¿Un fin de semana? Y, puestos a pedir, ¿por qué no buscar una mayor presencia en los medios y en las redes sociales? El trabajo es bueno, el objetivo merece la pena, ¿por qué no difundirlo al máximo?
Creo entender que la organización recae en muy pocas personas que, además, lo hacen de manera absolutamente voluntaria; pero, como dicen en México, "lo cortés no quita lo pizarro". Enhorabuena por lo conseguido y el Encuentro que viene, más y mejor.
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