Anda circulando por la Red un texto que no me resisto a incluir aquí.
En algún blog se define a Ackert como "Coach/Triner" y en ese mismo blog el texto aparece con "actores" en lugar de "artistas", lo que tiene su concordancia con lo que se dice unas líneas más abajo "... o a aquella interpretación que le robe el alma al público."
Y también ocurre que si en la primera parte del discurso sustituimos "artista" por inmigrante africano, por ejemplo, o un parado mayor de 50 años, o un joven en busca de su primer empleo, vemos que la excepcionalidad del artista no lo es tanto.
Y si atendemos a la segunda parte del discurso, los "seres que han probado el néctar de la vida..." no tienen de qué quejarse.
La enorme difusión del textito se debe, sin duda alguna, al ego de los artistas que no se resisten a verse compadecidos y ensalzados. ¡Pobrecitos ellos, tan grandes como son!
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